No te engañes a ti mismo

La vida es como un riachuelo que baja por la montaña; ayudado por la gravedad va buscando recovecos y pendientes más o menos pronunciadas para facilitar su camino. Pero aunque la dirección que lleva sea aproximadamente la misma, se encontrará con obstáculos como árboles, montículos, rocas o cualquier otra cosa que hará que se desvíe de su curso y así elegirá una nueva trayectoria.

Calma, sólo es una analogía, no me gusta la poesía ;)

Somos el resultado de nuestras propias elecciones en cada momento. Sin excusas. Si nos convertimos en personas superficiales, egoístas, bondadosas, mezquinas, apáticas o lo que seamos (aquí cabe cualquier calificativo), es porque ese es el camino que elegimos seguir en algún momento. Olvidad las auto-justificaciones, porque podéis consolaros echando la culpa a los demás o a todo lo malo que os ha pasado, pero nadie más que uno mismo es el responsable de la persona que ha decidido ser, de la persona que es.

¿Una infancia infeliz es un atenuante para cometer todo tipo de crímenes en la edad adulta? ¿Una adolescencia conflictiva justifica un futuro de autocompasión o de dependencia de sustancias psicotrópicas, alcohol o fármacos? La respuesta a estas preguntas siempre es NO.

Si eres autodestructivo es porque eso es lo que deseas ser, intentando llamar la atención de los demás con dramatizaciones más o menos impactantes. Pero esos dramas son tu responsabilidad, de nadie más.

Si has tomado malas decisiones en algún momento, estás a tiempo de tomar otras que amortigüen e incluso eliminen las que han sido deplorables para tu vida.

Y, por supuesto, no intentes exculparte diciendo que has empezado en FemDom y BDSM buscando alguna clase de terapia para superar nada, porque para ser sumiso, esclavo o Amo, primero has de tener tu cabecita bien amueblada. Aquí no se viene ni a superar complejos ni a volcar frustraciones, aquí se viene a ser felices desarrollando nuestros instintos, viviendo lo que queremos vivir e implicándonos hasta donde deseamos hacerlo.