martes, 13 de noviembre de 2012

Forced bi


Hay prácticas que generan enormes deseos y excitación a la vez que miedo y nerviosismo en el esclavo. Por ejemplo, la bisexualidad forzada.

Es una fantasía muy recurrente que suele ser considerada tabú por prejuicios que forman parte de una educación convencional. ¡Oh, la virilidad no puede ser puesta en duda! jajaja.. Cuánta tontería.

Ser forzado a mantener relaciones con otro hombre de la mano del Ama siendo heterosexual no es ningún crimen innombrable, os lo aseguro, es una maravillosa forma de entrega que, abriendo la mente y aparcando prejuicios, resulta altamente gratificante para todas las partes.

Y aún hay otras modalidades dentro del forced bi. Se puede llevar a un contexto de cuckold, es decir, cornudo consentido. ¿Te excita que tu Ama mantenga relaciones con otro hombre mientras te obliga a mirar habiendo preparado tu a ese hombre para Ella agarrado de los pelos (o de cualquier sitio) mientras abres tu boquita para que todo esté al gusto de tu Dueña?

Sé que te has hecho una imagen mental que te excita aunque no lo admitas. Y no, no eres homosexual. Relájate.

La bisexualidad forzada representa una humillación para el ego masculino, no deja de ser una destrucción ritual de esa hombría para someterla al Ama. Es puro morbo para el esclavo, pero también lo es para mi mente perversa, pues ejerzo el poder que tengo sobre él y lo disfruto completamente.

2 comentarios:

  1. Un día de estos tengo que escribir un post explayándome en el tema porque me pone muchísimo. A ver, en pocas, líneas, soy hetero, pero no tengo miedo a experimentar, así que podría ser bisexual si me gustara. Pero diría que sólo me atrevería a hacer un trío de estas características si el chico fuera el correcto y sobre todo si mi Ama estuviera totalmente seguro. Pondría la mano en el fuego que mi yo más femenina (la sissy Carla) se tiraría a la piscina con su bikini más sexy...

    saludos

    servus{Bastet}

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  2. Opino igual que Carlos Estévez. Dependería mucho del chico que toque. Evidentemente ni viejos barrigudos, ni barbas, bigotes, etc. Pero también creo que depende del nivel de excitación al que me lleven. Una vez un quiromasajista masculino me hizo una depilación anal y aprovechó para toquetearme. Lo hizo tan bien, que me llevó a una excitación altísima. Era mi primera experiencia y no se atrevió a más, pero si en ese momento hubiera querido penetrarme, se lo hubiera facilitado con pleno gusto... y quien sabe que más haría.. estaba excitadísimo.

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