¡Danzad, malditos!

Es fascinante observar a una pareja D/s cuando dan sus primeros pasos, cuando ves que congenian perfectamente y que podrían llegar a construir algo importante (aunque ellos todavía no lo saben).

Comienzan a hacer planes, a organizar sus primeros encuentros... nervios, risitas, sobresaltos...

¿Sois conscientes de lo privilegiados que somos de sentir tan intensamente, de que por años que pasen sigamos teniendo esas mariposas en el estómago y de que nuestras ilusiones sigan intactas?

No todo es idílico, por supuesto, todos tenemos problemas en nuestras vidas, incluso supongo que todos hemos pasado esas rachas de alejamiento temporal. Pero FemDom (y BDSM) es algo a lo que, si lo llevamos dentro, tarde o temprano acabamos volviendo.

No nos podemos engañar, esa intensidad nos atrae poderosamente. Chorros de adrenalina, cataratas de dopamina, neurotransmisores interpretando una danza hipnótica de euforia... y la coreógrafa de dicha danza es Ella, el Ama, la Mujer a la que descubrirás tus más íntimos anhelos, la que probablemente te llevará mucho más lejos de lo que creías posible y la que te hará darte de bruces contra ti mismo si así lo desea.

Algunos se resisten y se pierden experiencias indescriptibles, otros sucumben a los deseos.

¿Vendrás a la mazmorra esta noche a bailar con el Oasis Del Sado? Yo no me lo pierdo ;)