viernes, 17 de mayo de 2013

Límites

Son muchos los temas de los que he hablado ya, un poco de todo. Sé qué reacción tendrán unos u otros incluso mientras los voy desarrollando, pero la finalidad de este blog no es agradar a todo el mundo ni conseguir la aceptación general. No necesito vuestra aprobación y no voy a cambiar ni un ápice mi forma de ser y de vivir.

Y dicho esto, que supongo que alguno tomará como una afrenta más (¿no es increíble lo susceptible que es la gente? :D), quiero dejar claro que esto no es un manual del buen sumiso, de la buena Dómina, ni un aula de nada. Este es mi blog, ni más ni menos.

Hay tantas maneras de dominar como Dominantes existen. Ni todas somos iguales ni todas tenemos por qué estar de acuerdo con las demás. Yo, por ejemplo, sería incapaz de mantener una relación, como tantas que veo por ahí, en las que el Ama transige en las exigencias de sus sumisos y acaba por ceñirse a los deseos de aquéllos a los que supuestamente domina.

Cuando conozco a un sumiso que me agrada y decido ponerlo a prueba, hay grandes conversaciones donde existe un consenso inicial, es decir, pongo atención en esos límites que confiesa y tanteo los que desconoce pero sé que están ahí. Si sus límites no coinciden con los míos (sí, sí, las Amas tenemos nuestros límites, los míos tienen que ver con el sentido común, pero ese es otro tema) o no vislumbro una cierta disposición a superarlos, no lo aceptaré.

Lo que no puedo hacer es vivir pendiente de si esto o aquello molestará a alguien que está bajo mi control, no es necesario cuando ellos aceptan una Dominación real y confían en mi. Lógicamente, si alguno de sus límites me va a coartar a mi de hacer mi santa voluntad, no habrá mucho más que hablar con ese perrillo.

Esta es mi forma de hacer, pero hay otras. El que busque una Dominación a la carta, que sepa que también existe, supongo, que en este mundo tiene que haber de todo ;)

2 comentarios:

  1. Para mi, hay diferentes fases en la concepción de los limites:
    1. Cuando te identificas como sumiso, los limites propios son muchos e imaginas que las Damas también tendrán los suyos.
    2. Cuando me puse a buscar Domina, con la intención de hacer realidad mi sumisión, comprendí que tendria éxito si degradaba mis limites a niveles secundarios y priorizaba mi confianza en la Dama.
    Es indudable que el lema "Sensato, seguro y consensuado" del BDSM reduce los miedos del sumiso y permiten seguir en la búsqueda confiando en un potencial acuerdo.
    Nunca he entendido a los sumisos que se ofrecen sin limites y que presuntamente admiten todas las dinámicas como apetecibles, a no ser que supongan poder manejar la relación desde su posición dependiente.
    3. Cuando te conviertes en esclavo de un Ama, descubres la realidad, yo amo a una Diosa-Diabla, aprecio pertenecer a CruelDama y valoro como fuente de felicidad vivir en su Harem-Cuadra..., confió en seducirla con mi atención y con mi intención de superar mis limites; espero que su orgullo florezca con mi entrega a su voluntad y mi esfuerzo por satisfacerla;
    Creo los limites de mi Dueña deben ser sus deseos, su sentido común y su equilibrio emocional..., nunca mis aversiones.
    No puedo obviar el paralelismo que existe entre este "manifiesto" mio, con los insensatos buscadores que se ofrecen sin conocer a la Dama, tan habitual en los chats..., la diferencia esta, entre otras en que a mi no me apetece tener dinámicas que superen mis limites, con los que sé no voy a disfrutar, pero si la ofrezco mi sufrimiento. ¿me servirá para seducirla?.

    ResponderEliminar
  2. Todavía me queda un buen trecho por andar para ser un buen sumiso y dejar de exigir y sugerir...callarme y dejarla a Ella hacer siempre.

    A sus pies

    ResponderEliminar